¿POR QUÉ MIRARTE?

¿POR QUÉ MIRARTE?

¿Por qué mirar, Señor,

tu rostro ensangrentado,

tu cuerpo de martirio,

tu corona de espinas, ´

la burla de tu realeza

y la ofensa ultrajante del saludo:

¡Salve, Rey de los judíos!…”?

¿Por qué clavar mis ojos en tus clavos,

si sigo en el silencio,

temeroso,

aquí,

callado;

sin atreverme a despegar los labios,

a acariciar tu cuerpo malherido,

a desautorizar tu condena,

a proclamar tu inocencia;

o, al menos,

a pedirte humildemente perdón

y llorar amargamente mi pecado…?

¿Por qué mirar, Señor?…

Sólo porque Tú sigues mirando…

Y miras provocadoramente,

interrogando mi vida tan mezquina…

y sigues reclamando mi voluntad,

aunque sea en el silencio…

Te sigues fiando

de mi debilidad y cobardía,

me sigues diciendo en tu mirada

que no dude del perdón, de tu cariño;

y que esa cruz

culminante y plenitud de vida

es el signo definitivo

del triunfo de Dios,

que es tu llamada a la salvación,

si la hago mía…

¿Cómo no mirarte,

para pedirte perdón arrepentido,

para ver mi esterilidad y mi vacío,

y para,

al sentirme amado y perdonado,

hacer de tu cruz eterna compañía,

al ver en ella tu luz

y la aurora de la eterna alegría.

Por |2023-03-31T23:17:33+01:00abril 1st, 2023|Oraciones y música, Orar|Sin comentarios

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