BARUC 2,27- 3,7

Tú, Señor, Dios nuestro, nos habías tratado según tu inmensa piedad y compasión…

Señor todopoderoso, Dios de Israel,

un alma afligida y un espíritu abatido gritan a ti.

Escucha, Señor, ten piedad,

porque hemos pecado contra ti.

Tú reinas por siempre,

nosotros morimos para siempre…

No te acuerdes de los delitos de nuestros padres,

acuérdate hoy de tu mano y de tu nombre.

Porque tú eres el Señor, Dios nuestro,

y nosotros te alabamos, Señor.

Nos infundiste tu temor para que te invocásemos tu nombre

y te alabásemos en el destierro

y para que apartásemos nuestro corazón

de los pecados con que te ofendieron nuestros padres…

Por |2020-01-15T14:24:05+01:00enero 16th, 2020|Oraciones y música, Orar|Sin comentarios

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