CENIZA
Mirar la cruz,
y al ver tu cuerpo destrozado
sentir tanta vergüenza,
que no soporto tus ojos transparentes
ni la imborrable sonrisa de tus labios.
Y ya sólo me atrevo
a llorar de corazón,
y de tristeza,
al ver el tuyo traspasado.
Mezclar mis lágrimas culpables
con tu sangre pura derramada;
lamentar la crueldad y la mentira;
inclinar mi cabeza abochornado,
y que derramen sobre ella tu ceniza…
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